domingo, 6 de junio de 2010

Pumba.

Cuando la tele no anda, la radio se oye mal o un electrodoméstico se empaca, le damos un sopapo para ver si reacciona y se corrige.
A golpes se hacen los hombres, dicen, y a golpes a veces se intentan reparar los objetos.

Hoy el destino me ha puesto una buena piña.

Sacudido, trato de imaginarle un punto de vista positivo: lo hizo queriendo arreglarme.
Tal vez me haga arrancar y me saque bueno.

O quizás me haga esquivar a tiempo la próxima trompada, empecinado en andar correctamente sólo cuando se me de la gana.